Google decidió reducir de 18 a 9 meses el tiempo de almacenamiento de los datos personales, para hacer frente a las preocupaciones de reglamentación y como un paso más para mejorar la privacidad de los usuarios. Esta decisión responde a un pedido de un grupo de organismos europeos de protección de datos personales.
El almacenamiento de estos datos es primordial para el sector de la publicidad en línea, ya que permite definir los intereses de un internauta. Además Google dice que los datos recopilados siempre han sido un ingrediente fundamental de la innovación de sus productos.